Madrid www.madridiario.es 18/12/2009
jueves, 31 de diciembre de 2009
"EL COLOR DE LOS DIOSES" LLEGA A MADRID
Madrid www.madridiario.es 18/12/2009
sábado, 26 de diciembre de 2009
INFORME SEMANAL: Exposición "Las lágrimas de Eros" en el museo Thyssen
FELICITACIÓN DE LA ASOCIACIÓN ASTURIANA CÉFIRO A LOS PROFESORES DE LATÍN Y GRIEGO
miércoles, 23 de diciembre de 2009
AMANECER DEL "SOL INVICTVS" EN CABO SUNION
ENTREVISTA CON ANTONIO PIÑERO (Presentación de "Todos los Evangelios")
2. Καὶ ἐπέστρωσεν τὴν ὄνον καὶ ἐπεκάθισεν αὐτήν, καὶ εἶλκεν ὁ υἱὸς αὐτοῦ, καὶ ἠκολούθει Ἰωσήφ. Καὶ ἤγγισαν ἐπὶ μιλίων τριῶν· καὶ ἐστράφη Ἰωσήφ, καὶ εἶδεν αὐτὴν στυγνήν, καὶ εἶπεν ἐν ἑαυτῷ· “ Ἴσως τὸ ἐν αὐτῇ χειμάζει αὐτήν”. Καὶ πάλιν ἐστράφη ᾿Ιωσήφ, καὶ εἶδεν αὐτὴν γελῶσαν. Καὶ εἶπεν αὐτῇ· “ Μαριάμ, τί σοί ἐστιν τοῦτο, ὅτι τὸ πρόσωπόν σου βλέπω ποτὲ μὲν γελῶν, ποτὲ δὲ στυγνάζον;”καὶ εἶπε Μαριὰμ τῷ Ἰωσήφ· “ Ὄτι δύο λαοὺς βλέπω τοῖς ὀφθαλμοῖς μου, ἕνα κλαίοντα καὶ κοπτόμενον, καὶ ἕνα χαίροντα καὶ ἀγαλλιώμενον.”
3. Καὶ ἦλθον ἐν τῇ μέσῃ ὁδῷ, καὶ εἶπεν αὐτῷ Μαριάμ· “Κατάγαγέ με ἀπὸ τῆς ὄνου, ὅτι τὸ ἐν ἐμοὶ ἐπείγει με προελθεῖν”. Καὶ ἀπήγαγεν αὐτὴν ἀπὸ τῆς ὄνου, καὶ εἶπεν αὐτῇ· “ Ποῦ σε ἀπάξω καὶ σκεπάσω σου τὴν ἀσχημοσύνην; ὅτι ὁ τόπος ἔρημός ἐστιν.”
XVIII 1. Καὶ ηὗρεν σπήλαιον ἐκεῖ καὶ εἰσήγαγεν αὐτήν, καὶ παρέστησεν αὐτῇ τοὺς υἱοὺς αὐτοῦ, καὶ ἐξελθὼν ἐζήτει μαῖαν Ἑβραίαν ἐν χώρᾳ Βηθλεέμ.
2. Ἐγὼ δὲ Ἰωσὴφ περιεπάτουν, [καὶ οὐ περιεπάτουν·] καὶ ἀνέβλεψα εἰς τὸν ἀέρα, καὶ εἶδον τὸν ἀέρα ἔκθαμβον· καὶ ἀνέβλεψα εἰς τὸν πόλον τοῦ οὐρανοῦ, καὶ εἶδον αὐτὸν ἐστῶτα καὶ τὰ πετεινὰ τοῦ οὐρανοῦ ἠρεμοῦντα· καὶ ἐπέβλεψα ἐπὶ τὴν γῆν, καὶ εἶδον σκάφην κειμένην καὶ ἐργάτας ἀνακειμένους, καὶ αἱ χεῖρες αὐτῶν ἐν τῇ σκάφῃ· καὶ οἱ μασσώμενοι οὐκ ἐμασσῶντο, καὶ οἱ αἴροντες οὐκ ἀνέφερον, καὶ οἱ προσφέροντες τῷ στόματι αὐτῶν οὐ προσέφερον, ἀλλὰ πάντων ἦν τὰ πρὸσωπα ἄνω βλέποντα· καὶ ἰδοὺ πρόβατα ἐλαυνόμενα ἦν, καὶ [οὐ προέβαινον ἀλλ᾿] ἴσταντο, καὶ ἐπῆρεν ὁ ποιμὴν τὴν χεῖρα αὐτοῦ τοῦ πατάξαι αὐτὰ [ἐν τῷ ῥάβδῳ], καὶ ἡ χεὶρ αὐτοῦ ἔστη ἄνω· καὶ ἐπέβλεψα ἐπὶ τὸν χείμαρρον τοῦ ποταμοῦ, καὶ εἶδον τὰ στόματα τῶν ἐρίφων ἐπικείμενα καὶ μὴ πίνοντα, καὶ πάντα ὑπὸ θῆξιν τῷ δρόμῳ αὐτῶν ἀπηλαύνοντο.
Aurelio de Santos Otero: Los Evangelios Apócrifos. BAC. Madrid. 1996
ENYA: "ADESTE, FIDELES"
Κατὰ Λουκάν 2, 9-14.
Lucas 2, 9-14.
domingo, 20 de diciembre de 2009
EROS: DE LA TEOGONÍA DE HESÍODO A LA ANTIGUEDAD TARDÍA
Atenas | Reuters 10/12/2009
(Reportaje de Renee Maltezou, edición por Lucila Sigal).
Una exposición en el Museo de Arte Cicládico de Atenas recuerda cómo vivían la sexualidad griegos y romanos.
Sexo, amor y lujuria entre los dioses, los gobernantes y los simples mortales del mundo antiguo son el foco de una nueva exposición en la capital griega de este mes. Lámparas en forma fálica, cartas de amor gravadas en arcilla, y símbolos eróticos como amuletos de la suerte que datan del S. VII a. C. hasta el IV d. C. son sólo una fracción de lo que los visitantes podrán ver en una exposición dedicada al dios del amor en Grecia y más tarde en Roma.
"Eros: De la Teogonía de Hesíodo a la antigüedad tardía" se extiende desde el 10 de diciembre de 2009 al 5 de abril de 2010 en el Museo de Arte Cicládico de Atenas, con una colección de 280 piezas de 50 museos de Grecia, Chipre, Italia y Francia, como el Louvre.
La exposición examina el cambio de las percepciones de Eros (conocido como Cupido para los romanos) desde el siglo VIII a. C., cuando era visto como un dios influyente hasta la época romana cuando se convirtió en menos potente y simple compañero de Venus.
Los organizadores de la exposición dicen que los visitantes deben dejar al entrar en la puerta el sentido de la decencia del mundo moderno, porque los antiguos tenían muy pocos escrúpulos sobre el arte erótico.
"En la antigua Grecia se podía ver una escena sexual en un edificio público o privado de mala nota..., la gente no era mojigata", dijo el profesor Nicholas Stampolidis, director del Museo de Arte de las Cícladas.
"Hoy todo puede ser visto en revistas o en Internet, y, a pesar de esta libertad, hay una hipocresía enorme, un puritanismo inexplicable", dijo Stampolidis.
La exposición se divide en nueve secciones, inspirada por el número de las musas griegas antiguas, las diosas de la literatura y las artes. Se inicia con el nacimiento y la crianza de Eros. En uno de los jarrones, su madre, Afrodita, la diosa de la belleza, está lista para azotar a Eros bebé con una sandalia.
Eros crece y con él la lista de conquistas de los que han sido golpeados por sus flechas de amor. Lo que sigue es un Eros alado, apuntando sus flechas amorosas a los antiguos dioses y seres humanos.
Personajes tocados (por Eros) a lo largo de toda la historia griega y romana, incluidas parejas famosas tales como Marco Antonio y Cleopatra, cuya relación tórrida afectó el destino de dos de las naciones más grandes del mundo antiguo.
La exposición termina con el amor homosexual, la prostitución y los símbolos eróticos en artículos de uso cotidiano, tales como floreros, de los cuales se creía proporcionaban la fertilidad o simplemente utilizados para animar al personal.
"La gente sacará sus conclusiones sobre los seres humanos y Eros, y verá cómo se conceptuaba en la antigüedad y cómo se está comercializando hoy en día", dijo Stampolidis.
Algunas de las habitaciones tendrán las advertencias para los menores de 16 años de edad, pero la exposición está abierta a las escuelas y los niños. "Yo no veo por qué los niños deben aprender sobre el amor sólo de revistas, de amigos y no a través del arte", dijo Stampolidis.
Vide: La misma noticia en Euronews
LA GUERRA DEL PELOPONESO de Donald kagan
El conflicto del Peloponeso, Heráclito y las memorias de un helenista.
En Grecia reside buena parte de lo que somos y, quizá por ello, el interés por un universo que está en nuestro sustrato más profundo nunca decae. En ocasiones, las publicaciones que nos remiten a ese tiempo fundacional pueden enlazarse con vínculos sutiles. Así quedan unidos aquí un conflicto que trastocó todo un mundo, el joven que en otra guerra equiparable, 2.300 años después de aquella, encauzó su vida hacia el conocimiento de momentos imperecederos y el hombre que propició el abandono de los mitos para buscar saberes más fiables.
«En las postrimerías del siglo V a. C. y durante casi tres décadas, el Imperio ateniense se batió contra la Liga espartana en una terrible contienda que cambió el mundo helénico y su civilización para siempre». Así, con resonancias clásicas, arranca 'La guerra del Peloponeso' de Donald Kagan, libro en el que este estudioso del mundo antiguo, profesor de la Universidad de Cornwell, comprime cuatro tomos, resultado de cincuenta años de estudio del conflicto que acabó con la pujanza de Atenas y debilitó la civilización griega, que no recobrará su vigor hasta la llegada de Alejandro Magno.
Pensado para que el lector no especializado se adentre en un conflicto que «sigue siendo la guerra más instructiva de toda la Historia de la humanidad» -en palabras de Robin Lane Fox, profesor de Historia Antigua en Oxford y otro de los grandes conocedores de aquel momento-, la obra de Kagan ilustra sobre la fragmentación del mundo griego y las profundas diferencias en el seno de lo que tendemos a percibir como un universo unitario. Vinculados por un territorio, una lengua y una etnia comunes, casi podría afirmarse que es más lo que los separa a la vista de las insalvables diferencias entre espartanos y atenienses. Y la distancia no reside sólo en la organización política. Pericles en la Oración Fúnebre con la que despide a los muertos en esa guerra expone el ideal ateniense y muestra el orgullo de un modo de vivir . Detrás de unas disputas territoriales entre aquellos que juntos frenaron el avance persa se ocultan, para Robin Lane Fox, «la completa diferencia de estilos de vida, de cultura y de mentalidad existente entre los atenienses y los espartanos».
«La guerra del Peloponeso fue un conflicto armado de una brutalidad sin precedentes, en el que incluso se violó el severo código que había presidido hasta entonces la forma griega de hacer la guerra, y en el que se quebró la delgada línea que separa la civilización de la barbarie», expone Kagan. «Un período de estancamiento, sombrío y pernicioso», añade Robin Lane Fox que «constituye una prueba evidente del fracaso político de los antiguos griegos».
Kagan refleja la magnitud de aquel conflicto cuando escribe: «Desde la perspectiva de los griegos del siglo V, la Guerra del Peloponeso fue percibida en buena manera como una guerra mundial, a causa de la enorme destrucción de vidas y propiedades que conllevó».
El mar Egeo era el centro de aquel mundo sometido a la bélica destrucción. Y hacia ese mar, el de Homero, navega en 1941, en el contexto de otra guerra también mundial aunque con unas dimensiones planetarias que empequeñecen hasta lo minúsculo al antiguo escenario griego, un joven oficial británico, estudiante de Cambridge alistado en la marina. Un joven que está llamado a convertirse en uno de los grandes expertos en el pensamiento presocrático, ese momento de transición entre el mito y el logos, entre la visión primitiva de la naturaleza y el intento de explicarla a partir de la materia y sus reglas. Un tiempo que aún hoy constituye un período de conocimiento intrincado y atractivo, sujeto a la interpretación, fragmentario y abierto. Y un tiempo que absorberá la inquietud intelectual de ese Geoffrey S. Kirk que en un mar, que ya lejos de ser el centro de la civilización es apenas una esquina de esa guerra mundial, se integrará en una flotilla británica de pequeños barcos camuflados -una rareza de la Royal Navy- dedicada a acometer acciones rápidas y sorpresivas por las islas del Egeo.
Kirk construye con la elección de ese destino su futura vida de helenista. Prolonga allí una admiración por el mundo clásico surgida en el jardín de infancia y la guerra le proporciona ocasiones de conocer sobre el terreno auténticas ruinas griegas, de adentrase en el escenario real de una pasión alimentada hasta ahora sólo por los libros. Avanza así en el camino que lo llevará convertirse, junto a Raven, en autor de Los filósofos presocráticos, un texto clásico imprescindible para conocer los grandes nombres de ese período. El Kirk estudioso descubre en estas aventuras «en el corazón de las aguas del color del vino» que también lleva dentro un hombre de acción... aunque sin pasarse. Sus memorias dejan además retazos deliciosos de la vida académica y aspectos nada risibles de la marina real británica.
Entre los primeros asuntos de interés intelectual de Kirk figura Heráclito de Éfeso, de sobrenombre El Oscuro, envuelto en esa confusión que impone la fragmentación de su saber, que nunca nos llega de forma directa ni completa y queda a merced de fuentes secundarias. Geoffrey S. Kirk comparte el desdén de Heráclito hacia «la erudición que no instruye al pensamiento» y reniega de «las eruditas notas a pie de página y las bibliografías exuberantes», con el propósito de conseguir «más claridad, al coste de que los críticos me atribuyan cierto desdén por la opinión de otros».
De ese Heráclito, en el que Hegel personifica el inicio de la filosofía, llega una nueva recopilación de 126 fragmentos con la singularidad de que cada uno de ellos se acompaña de las interpretaciones más significativas. Magnífico libro en el que encontramos al Heráclito que se aleja de los supuestos saberes de quienes lo preceden -«Maestro de muchos es Hesíodo. Atribuyen la más grande sabiduría a alguien que ni siquiera comprendía que el día y la noche son una misma cosa»-, capaz de explicar el mundo «por la discordia y necesidad» y que nos sustrae al capricho de los dioses, nos proporciona individualidad y autonomía cuando proclama que «el carácter del hombre es su destino».
Si Heráclito revelaba la consideración de la guerra como un proceso de desarrollo personal, de crecimiento del hombre, al afirmar que «las almas caídas en combate son más puras que las que sucumben a la enfermedad», Geoffrey S. Kirk, tras comprobar el modo en que los episodios bélicos barbarizan a quienes eran «auténticos héroes homéricos», advierte que la guerra sólo es «un negocio sucio». Una inflexión, en el pensar sobre asunto tan humano, que empezó a fraguarse en la guerra del Peloponeso, cuando su primer historiador, Tucídides, advertía ya que «la guerra es maestra de la violencia».
Via: CulturaClásica.com
sábado, 12 de diciembre de 2009
ELENA PAPARIZOU: Κοίτα μπροστά
EGIPTO RECLAMA AL REINO UNIDO LA PIEDRA DE ROSETTA
EFE | ABC Miércoles , 09-12-09
“Nuestro patrimonio cultural nos fue arrebatado a lo largo de toda nuestra historia. Es importante para los egipcios que nos sea devuelto”, insistió Hawass en declaraciones al periódico «The Times» tras calificar la Piedra de Rosetta de “icono de la identidad egipcia”.
La piedra, que pasó en 1801 a manos británicas, lleva en su superficie grabado un texto, la primera parte en griego y la segunda en jeroglífico, que fue estudiado e interpretado por el francés Jean-François Champollion.
Hawass aprovechará su visita a la capital británica para reunirse con otros egiptólogos -él también lo es-, y llega al Reino Unido con la satisfacción de haber logrado el regreso de cinco fragmentos de frescos pertenecientes a una tumba egipcia que conservaba el parisino Museo del Louvre. Egipto decidió suspender la cooperación arqueológica con el museo francés hasta que no le fueran devueltas estas piezas, amenaza que consiguió que el actual ministro de Cultura, Frédéric Mitterrand, aceptara el regreso de los frescos sólo dos días después.
Mutis por el foro
Hawass reclamó por primera vez la devolución de la Piedra de Rosetta en julio de 2003, aunque sólo consiguió que el Museo Británico enviara una réplica a Egipto en 2005. Este museo reiteró ayer mismo a «The Times» que no se plantea devolver la pieza original a su país de origen.
Via: Noticias de Historia Antigua y Arqueología
lunes, 7 de diciembre de 2009
IX CONCURSO ANUAL EUROPEO DE TRADUCCIÓN DE GRIEGO 2010
o bien por correo ordinario a:
BREVE BIOGRAFÍA DE SÓCRATES
sábado, 5 de diciembre de 2009
GRECIA RESTAURA EL TEATRO DE DIONISO, LA CUNA DEL TEATRO
Atenas | AP 25/11/2009
El teatro de mármol en ruinas bajo la Acrópolis, donde las obras de Eurípides y otros dramaturgos clásicos debutaron hace 2.500 años, será parcialmente restaurado, dijeron las autoridades griegas.
El Ministerio de Cultura dijo el miércoles que el trabajo de 6 millones de euros (9 millones de dólares) estaría terminado para el 2015 y que incluirá extensas adiciones modernas a los asientos de mármol que quedan del Teatro de Dionisio.
Construido en la ladera sur de la colina de la Acrópolis, el teatro se usó por primera vez a finales del siglo VI a.C. Albergó las primeras presentaciones de tragedias de Esquilo, Sófocles y Eurípides, así como las comedias de Aristófanes. Sobrevive una pequeña sección del aforo del siglo IV a.C., con capacidad para hasta 15.000 espectadores.
ENLACES: El Teatro de Dioniso en Wikipedia
Via: CulturaClásica.com
jueves, 3 de diciembre de 2009
PERCY JACKSON Y LOS DIOSES DEL OLIMPO: El ladrón del rayo (estreno el 19 de febrero de 2010)
Pierce Brosnan es Chiron, entrenador de héroes; Uma Thurman es Medusa; Kevin McKidd, Poseidón; Rosario Dawson, Perséfone; Steve Coogan, Hades, y un largo etcétera. Dirige la película Chris Columbus, autor de las primeras entregas de Harry Potter.
Percy Jackson and the Olympians (Febrero 19, 2010)
Via: DOCEO ET DISCO / ΔΙΔΑΣΚΩ ΚΑΙ ΜΑΝΘΑΝΩ